Entre pairos y derivas....

Luego de mucho tiempo me anime a viajar... pese a que lo tengo como un sueño, quizás, erroneamente, no lo tengo como una de mis prioridades....

Me anime a viajar para tratar de encontrarme, el buscar lo que hace mucho perdí, y me hizo caer en una dedicación extrema al trabajo, si andas soltero no hay problema, si compartes tiempo con alguien no es recomendable.

Busco el sonreir, en volver a hallar el sentido simple de las cosas, que el día a día, a muchos nos hace olvidar, cambiándolo por necesidades algo superfluas, y obligandonos a trabajar mas para tener mas... pero, a que costa?

A veces es necesario el alejarse de todo, descolgarse del trabajo, de los amigos, del necesario y enviciante internet, y mirar alrededor, que cambia, crece, y depende de uno el ser parte de ese mundo, o tan solo vivir en un mundo creado por uno mismo.

La felicidad no es eterna en nuestra línea de vida, pero si puede ser hallada, perdida, y vuelta a hallar, pero en lo mas sencillo, en ver una mirada, buscar una sonrisa, en sentir como el viento te golpea y te hace sentir, en la lluvia, tan maravillosa, de la cual a veces nos escapamos buscando refugio, y no vemos realmente lo que es, un milagro... Bueno, en Lima no llueve a cantaros, por eso me gusta a veces terminar algo empapado cuando viajo a otras ciudades.

Es agradable el llenar los sentidos, como un niño que aprende, percibe y capta todo. Me gustó, el poder mirar, observar, todo alrededor, un paraíso descubierto otrora por Colón, poder apreciar miradas llenas de vida de sueños, miradas coquetas, miradas de personas con experiencia y mucho conocimiento.

Me gustó el percibir distintos aromas, perfumes que te envuelven de un aroma único de mujer, en la playa, poder percibir la sal en el ambiente, y en el campo, el olor a lluvia entre las plantas, o el aroma de los leños en una cocina, que a cualquiera que halla tenido familia en el campo, lo puede transportar en el tiempo. Los sabores son muy distintos, tanto en la comida, como en algunos licores, inclusive el Atlántico, lo hallo mas salado que el Pacífico. Y ni que hablar del sonido de la lluvia pegando en tu ventana, en lo mas profundo de la noche.

Son los viajes, los que nos hacen despertar, nos hacen sentir vivos, o como me decían, cuando me adentré en las lomas de Santiago, tómese foto allá, que sino no creerán que estuvo aquí.

Como me embarqué en este viaje? Hace mucho me lo debía, y conociendo ya ahora aquí, irónicamente puedo decir, ya estuve aquí en sueños (no mas de un año), caminando frente a lo que llaman el Monumento, curioso no?, nunca había visto referencia de el. A donde me llevará mi próximo sueño?

Alguna vez morí, y creo que arrojaron partes de mi ser en distintos lugares..., en estos viajes, las estoy hallando....

Y me gustó el estar en este país, República Dominicana, en Puerto Plata y Santiago de los Caballeros.... del que aun se, me falta conocer mas, si el destino y el tiempo lo permiten, quizás mas adelante....

Y frente al mar empecé a intentar escribir nuevamente, a ver como hallan fin estas líneas.....

"Al final solo queda el ser parte del momento..."

"Alimentas, un sueño que extingues...."

"Me pierdo en tu mirada, ese par de luceros que me iluminan en mis noches mas oscuras...."

Y como dice el título, que es una canción del gran Fernando Delgadillo... porque quizás en mucho tiempo, ya solo solté amarras y voy a la deriva....